A principios de este mismo mes, los países de occidente votaron en contra del resto del mundo en las resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, oponiéndose a la democracia, los derechos humanos y la diversidad cultural, al tiempo que apoyaron a los mercenarios y las medidas coercitivas unilaterales (sanciones y bloqueos). Interesante análisis de las votaciones realizadas que muestran, negro sobre blanco y sin olvidar a España (y su “progresista” gobierno), el “alineamiento” imperialista de los responsables gubernamentales de los países autocalificados como más democráticos y humanitarios, aunque en realidad apoyan justo lo contrario.
Ben Norton, Economía Geopolítica.
Los gobiernos occidentales afirman con frecuencia que sus políticas exteriores e interiores están motivadas por los “derechos humanos” y la “democracia”. A menudo incluso sermonean a sus adversarios por supuestamente no respetar estas preocupaciones.
Pero en el escenario internacional, las capitales occidentales han demostrado que sus compromisos son meramente retóricos, ya que han votado sistemáticamente en contra de estas nobles causas y se han negado a apoyar medidas que las protegerían tangiblemente, en flagrante violación de la voluntad de la gran mayoría de la comunidad internacional.
Este doble rasero se puso de manifiesto el 7 de noviembre en la reunión de la Tercera Comisión de la Asamblea General de las Naciones Unidas, dedicada a cuestiones sociales, humanitarias y culturales.
En esta sesión de tres horas, Occidente se opuso a los proyectos de resolución que pedían promover la democracia, los derechos humanos y la diversidad cultural, al tiempo que apoyaba el uso de mercenarios y la aplicación de medidas coercitivas unilaterales, comúnmente conocidas como sanciones.
El Occidente extendido votó en contra del resto del mundo en estos temas. Sus posiciones eran prácticamente uniformes como bloque, liderado por Estados Unidos, incluyendo Europa, Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Corea del Sur y Japón.
De hecho, el presidente de la Tercera Comisión de la Asamblea General es el representante de Austria ante las Naciones Unidas, Alexander Marschik, e incluso él no pudo evitar reírse en la sesión ante las constantes protestas del representante estadounidense, que dominó el debate, hablando en contra de casi todas las resoluciones para explicar por qué el mundo debería unirse a Washington para votar en contra. (Marschik no pudo contener la risa a pesar de que su propio país, Austria, votó junto con Estados Unidos en cada resolución).
Sanciones
En la sesión del 7 de noviembre, las naciones debatieron un borrador que condenaba las medidas coercitivas unilaterales, o sanciones, por violar los derechos humanos de los civiles en los países atacados. La resolución fue aprobada con 128 votos a favor, 54 en contra y ninguna abstención.
Promover “un orden internacional democrático y equitativo”
La Tercera Comisión de la Asamblea General también examinó una medida en la que se pedía la “promoción de un orden internacional democrático y equitativo”. La resolución fue aprobada con 123 votos a favor y 54 en contra, más 7 abstenciones (de Armenia, Chile, Costa Rica, Liberia, México, Perú, Uruguay).
Respeto a los “derechos humanos y la diversidad cultural”
Otra resolución buscaba promover “los derechos humanos y la diversidad cultural”. La medida fue aprobada con 130 votos a favor, 54 en contra y ninguna abstención.
Promoción de la “distribución geográfica equitativa” en los órganos creados en virtud de tratados de derechos humanos
La Tercera Comisión deliberó un proyecto en el que se pedía la “promoción de la distribución geográfica equitativa entre los miembros de los órganos creados en virtud de tratados de derechos humanos”. La resolución fue aprobada con 128 votos a favor, 52 en contra y ninguna abstención.
Mercenarios
Otra medida condenó la “utilización de mercenarios como medio de violar los derechos humanos e impedir el ejercicio del derecho de los pueblos a la libre determinación”. La resolución fue aprobada con 126 votos a favor y 52 en contra, además de 6 abstenciones (de Kiribati, Liberia, Palau, México, Tonga y Suiza).
Las Naciones Unidas publicaron un video completo de la sesión de la Tercera Comisión el 7 de noviembre, en la 48ª sesión plenaria del 78º período de sesiones de la Asamblea General.