Enrique Morales. Theobjective.com
La brecha de género en las pensiones de jubilación sigue ensanchándose pese a los esfuerzos para reducirla vía pluses y complementos de maternidad. Los últimos datos que se desprenden de la estadística de pensiones que elabora el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones muestran que, lejos de recortarse las diferencias salariales en la pensión entre hombres y mujeres, estas han aumentado.
En febrero de 2021 entró en vigor el complemento para la reducción de la brecha de género –ver Real Decreto-ley 3/2021– que buscaba acabar con el perjuicio laboral que supone para las mujeres la maternidad y el posterior cuidado de los hijos. A este plus también pueden acceder los hombres si acreditan -como las mujeres- un parón laboral para cuidado a los hijos. De momento, como muestra la estadística, esta circunstancia es excepcional.
Pero, lo que en principio se planteaba como un mecanismo para reducir la brecha entre pensiones, no ha tenido de momento los efectos positivos deseados. El pasado mes de agosto -último dato disponible- las jubiladas con pensiones contributivas recibían de media 1.078 euros. Mientras, los hombres obtenían una media de 1.478,4 euros.
Brecha de género permanente
La diferencia se reduce, muy ligeramente, si tenemos en cuenta las pensiones de viudedad -en las que las mujeres son mayoritarias y cobran más que los hombres-, incapacidad y orfandad. En este caso, el desequilibrio salarial es de 471 euros e implica un porcentaje del 48%.
Otra de las claves está en la brecha que existía en años anteriores, siempre presente por las amplias diferencias salariales y de carrera laboral entre hombres y mujeres. En enero de 2021, el mes anterior a la entrada en vigor de la medida, la diferencia entre las prestaciones de hombres y mujeres era de 455 euros, 46 euros menos que a día de hoy. En agosto de 2023 había 1,42 millones de pensionistas cobrando el complemento de maternidad del PP o el de brecha de género del PSOE. De este total, 1,3 millones eran mujeres. Hoy la factura asciende a 161 millones mensuales.
Reforma ineficientes
Además de causas previas como menores salarios, jornadas parciales y carreras más cortas, las mujeres han empezado a entrar con fuerza en el sistema de pensiones y su peso estadístico se nota.
Sin embargo, la clave sigue siendo la asunción de las responsabilidades del hogar y familiares por parte de las mujeres, un asunto que difícilmente cambia con una app de asignación de tareas domésticas. Pese a las buenas intenciones del Gobierno con el impulso de este complemento, 30 meses después los efectos de la iniciativa han sido nulos.
Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), de 2020, muestran que el salario anual más frecuente en las mujeres (13.531,7 euros). Esto representa el 73,2% del salario más frecuente en los hombres (18.491,7 euros). En el salario mediano este porcentaje es del 81,5% y en el salario medio bruto del 81,3%.
Un plus para la jubilación
El complemento para la reducción de la brecha de género, que sustituye al plus por maternidad por aportación demográfica, está destinado a los pensionistas contributivos. La cuantía se fija en los PGE cada año y en 2023 es de 30,4 mensuales por cada hijo o hija, con el límite de cuatro veces dicho importe.
En complemento no se tiene en cuenta en la aplicación del límite máximo de las pensiones contributivas ni para determinar el complemento para pensiones inferiores a la mínima. Según destaca la Seguridad Social, el complemento no lo pueden percibir los dos progenitores por los mismos hijos y se incluye en las 14 pagas.