La administración Biden ha dado a conocer detalles sobre su propuesta masiva de proporcionar armas a Israel y Ucrania, así como fondos para construir activos militares en la región que rodea a China. Una propuesta que saldrá adelante si o si, como ya advirtió este mismo mandatario, añadiendo que servirá para marcar el devenir mundial por décadas.
Kyle Anzalone, Antiwar.com
La Casa Blanca busca 105.000 millones de dólares para armar a Israel, Ucrania y Taiwán
El viernes 20 de octubre, la Casa Blanca presentó su proyecto de ley de 105.000 millones de dólares para armar a Ucrania, Israel y Taiwán. La legislación también incluye fondos para la frontera y la asistencia humanitaria. Funcionarios estadounidenses dicen que más de 50.000 millones de dólares se destinarán a los fabricantes de armas estadounidenses.
El gobierno de Biden está proponiendo un paquete de ayuda masivo mientras lucha por lograr que el Congreso asigne más fondos para la guerra de poder en Ucrania. La mayor parte del dinero es para Ucrania, con 61.400 millones de dólares. La Casa Blanca quiere suficiente dinero para que Ucrania financie a Kiev hasta las elecciones de 2024.
El asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, describió la ayuda como crítica para la seguridad nacional de Estados Unidos y exigió que el Congreso aprobara el proyecto de ley. “Esta solicitud de presupuesto es fundamental para promover la seguridad nacional de Estados Unidos y garantizar la seguridad del pueblo estadounidense”, dijo Sullivan. “El mundo está observando de cerca lo que el Congreso haga a continuación”.
Israel recibirá 14.300 millones de dólares en asistencia, con 10.600 millones de dólares para apoyo de defensa aérea y antimisiles. La ayuda se sumaría a los 3.800 millones de dólares que Tel Aviv recibe de Washington en asistencia de seguridad anualmente.
Biden anunció la legislación en un discurso el jueves por la noche: “El liderazgo estadounidense es lo que mantiene unido al mundo. Las alianzas estadounidenses son las que nos mantienen seguros en Estados Unidos. Los valores estadounidenses son los que nos convierten en una nación socia con la que quieres trabajar”. Y continuó: “Poner todo eso en riesgo, nos alejamos de Ucrania, le damos la espalda a Israel, simplemente no vale la pena. Es por eso que mañana enviaré al Congreso una solicitud de presupuesto urgente para financiar las necesidades de seguridad nacional de Estados Unidos, necesita apoyar a nuestros socios críticos, incluidos Israel y Ucrania”.
El proyecto de ley incluye 7.400 millones de dólares para varias iniciativas destinadas a aumentar la postura militar de Washington en el Indo-Pacífico. Eso incluye 2.000 millones de dólares en subvenciones para que gobiernos extranjeros compren armas estadounidenses. Taiwán recibirá una parte de ese dinero, aunque los funcionarios estadounidenses no proporcionaron un desglose detallado.
La directora de la Oficina de Administración y Presupuesto, Shalanda Young, explicó que casi la mitad del dinero se destinará a los fabricantes de armas estadounidenses. “Esta solicitud suplementaria invierte más de 50.000 millones de dólares en la base industrial de defensa estadounidense, lo que garantiza que nuestras fuerzas armadas continúen siendo la fuerza de combate más preparada, capaz y mejor equipada que el mundo haya visto jamás”, dijo.
Young afirmó que el gasto reforzaría la economía estadounidense y crearía empleos. Sin embargo, un estudio indicó que el gasto militar cuesta más puestos de trabajo de los que crea.
Además, 14.000 millones de dólares se destinarán a la seguridad fronteriza. La Casa Blanca afirmó que era necesario para “mantener segura la frontera suroeste y detener el flujo de fentanilo”. Una parte de esos fondos se destinará a la contratación de miles de agentes de la ley.
Un pequeño número de representantes republicanos ha impedido que el Congreso apruebe fondos adicionales para Ucrania. La administración Biden espera presionar a varios miembros republicanos del Congreso para que voten a favor del proyecto de ley combinando fondos para Taiwán, Israel y la frontera con Ucrania.
