Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública
COMUNICADO
Desde la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública queremos manifestar nuestro asombro y rechazo a que el Ministerio para la Transición Digital y de la Función Pública, de un gobierno progresista, haya cedido a la presión chantajista de las principales aseguradoras que contratan la asistencia al personal funcionario público a través de MUFACE
1.- Resulta inaceptable que el Ministerio para la transición Digital y la Función Pública, que nada tiene que ver con la sanidad, presuma de haber salvado a MUFACE tras haber “trabajado sin descanso con las aseguradoras privadas” (sic), para perpetuar un sistema obsoleto e ineficiente, que no existe en ningún lugar del mundo por ser un subsistema privado dentro de un sistema sanitario público (pagado por este último).
2.- El acuerdo aumenta la prima en un 41,2 % mientras del gasto sanitario total ha crecido tan solo un 4,5% (supone casi un 90% más) hasta alcanzar los 4.808,5 millones de euros (1.276,5 millones de euros más que actual concierto) para las aseguradoras.
3.- Esta concesión ha sido recibida con júbilo por las dos principales aseguradoras de Muface (Adeslas y Asisa) que ven incrementarse así de manera exponencial sus ganancias a costa del Estado.
4.- De esta manera se perpetúa un modelo que favorece a tan solo 1,5 millones de ciudadanos que mantienen el derecho a recibir mayores prestaciones (prótesis, gafas, atención dental..) que el resto de la población y al que se permite cambiar a la sanidad pública en caso de sufrir enfermedades graves para ser atendidos en los hospitales públicos (mejor equipados y que ofrece una mayor calidad y seguridad que los privados).
5.- Esta decisión potencia a un sector privado cada vez más concentrado en grandes grupos hospitalarios en manos de fondos de inversión y capital riesgo y que han ganado miles de millones de euros en transacciones. Estas empresas pretenden alcanzar una posición de oligopolio para negociar con las aseguradoras desde una posición de fuerza (los conciertos con las aseguradoras suponen el 65% de los ingresos de estos hospitales, un 25% procede de conciertos con la sanidad pública y un 10% de pacientes privados).
6.- Las aseguradoras beneficiarias del acuerdo con MUFACE son empresas cada vez más poderosas que han manifestado su intención de controlar cada vez más espacio sanitario:
– ASISA cuenta con su propia red asistencial (Grupo Hospitalario HLA) con 18 hospitales y 35 centros médicos de especialidades; tiene presencia en Portugal; Italia, en Suiza, en Latinoamérica, Brasil México y Nicaragua, en Oriente Próximo y Emiratos; y pertenece al grupo empresarial Corporación Financiera Alba de la familia Entrecanales una de las más influyentes y poderosas de España, que tienen un gran poder en el mundo empresarial y político.
– ADESLAS (SegurCaixa) Aunque se había retirado inicialmente de la licitación tras el aumento de la prima al 41% (antes un 17%) ha manifestado su disposición a continuar en MUFACE. Esta aseguradora está integrada en el Grupo Mutua Madrileña y participada por CaixaBank.
Perpetuar MUFACE supone mantener la desigualdad y la ineficiencia en la atención sanitaria y supone un paso adelante en el camino de la privatización sanitaria.
7.- Cabe destacar, positivamente, que el Ministerio de Sanidad, en su pretensión de dar cumplimiento a la Ley General de Sanidad, presentó un plan de transición y transferencia para integrar a todas las personas mutualistas en el Sistema Sanitario Público, garantizando su atención, suponiendo, así, una mejora de la calidad asistencial.