Coordinadora Estatal Por la Defensa del Sistema Público de Pensiones (COESPE)
La COESPE ante el acuerdo sobre materias de jubilación
El coste de la vida sigue aumentando, como también lo reflejan otros indicadores económicos que afectan a la mayoría social, especialmente a las personas pensionistas. Esto implica un agravamiento y deterioro de la calidad de vida de los sectores populares. Mientras tanto, la propaganda oficial intenta mostrar una supuesta mejoría, preparando subidas salariales y de pensiones públicas para 2025 que estarán por debajo del incremento real de los precios.
Es evidente que el desajuste entre el coste de los productos de primera necesidad y el incremento de las pensiones es un problema que afecta a cientos de miles de pensionistas.
Aunque los datos más recientes muestran que el gasto en pensiones en España ha aumentado un 5,1% respecto al año anterior, alcanzando un coste mensual de 12.828,7 millones de euros, muchas personas pensionistas siguen enfrentándose a serias dificultades para cubrir necesidades básicas, como la alimentación y la medicación.
Este problema es aún más grave en el caso de las mujeres pensionistas, quienes perciben pensiones significativamente más bajas que los hombres, lo que refleja una persistente brecha de género en el sistema de pensiones.
Aunque la pensión media se sitúa en 1.256,7 euros al mes, esta cifra no refleja las importantes diferencias entre los distintos tipos de pensiones e, incluso, entre comunidades autónomas. Por ejemplo, la pensión media de viudedad es de 897,3 euros al mes, lo que pone de manifiesto la variabilidad y la necesidad de abordar las particularidades de cada caso.
Además, en España, cerca del 50% de las personas jubiladas perciben una pensión que no alcanza el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), según los últimos datos del gobierno. Esta situación afecta a un gran número de personas mayores que dependen de sus pensiones para cubrir sus necesidades básicas.
El coste de la vida representa aproximadamente el 70% del salario medio, dejando un margen muy reducido para otros gastos esenciales.
Ante este panorama, COESPE continúa reivindicando que el incremento de las pensiones sea equivalente al aumento del coste de la vida, como única forma de evitar la pérdida de poder adquisitivo año tras año.
Asimismo, es fundamental abordar las desigualdades de género en el sistema de pensiones y garantizar que todas las personas pensionistas puedan vivir con dignidad.
Estas y muchas otras razones deben darnos la fuerza para seguir movilizándonos en las calles y exigiendo nuestras reivindicaciones, entre ellas:
• Revalorización anual de las pensiones conforme al Índice de Precios al Consumo (IPC) REAL.
• Igualar las pensiones mínimas al Salario Mínimo Interprofesional YA.
Es fundamental hacer pedagogía entre jóvenes, trabajadoras/es y la sociedad en general: la única manera de lograr que el gobierno acepte estas reivindicaciones es mediante la lucha ininterrumpida en plazas y calles. Los movimientos sociales y la clase trabajadora, junto con jubiladas/os y pensionistas, debemos unirnos en las acciones descentralizadas en todo el Estado por el Día Internacional de las Personas Mayores y en la manifestación estatal del 26 de octubre a las 11:00 horas en Madrid, desde Atocha hasta Sol.
La movilización es nuestra fuerza, y la unión en la lucha, el único camino, porque:
“Gobierne quien gobierne, las pensiones públicas, los derechos y los servicios públicos se defienden”.
Comisión de Comunicación. 16 de septiembre de 2024
