Redacción. Struggle.org
Declaración de las organizaciones revolucionarias en Rusia
¡Camaradas! Hoy nos unimos contra el sistema capitalista, por la conquista del poder por los trabajadores y por la privación de este poder a la clase burguesa explotadora. El punto de referencia y el faro para nosotros en esta lucha, la mejor prueba de la justeza y la necesidad de nuestra causa, es el acontecimiento principal del siglo XX: la Revolución Socialista de Octubre de 1917.
El Gran Octubre ya tiene 107 años, pero dado que este evento es epocal, determinando el principal vector de desarrollo de la historia humana para los siglos venideros, no está sujeto a ningún envejecimiento. Repitamos lo que es bien conocido y evidente para todos los que miran el proceso del desarrollo mundial con objetividad y no lo tergiversan para complacer a la clase burguesa.
La importancia de Octubre es que, por primera vez en la historia, el poder fue tomado por los oprimidos y explotados, obreros y campesinos, disipando el mito de que sólo los representantes de las clases poseedoras podían gobernar. Esto fue posible gracias a la revolución llevada a cabo bajo la dirección de un partido proletario curtido en batallas de clases: el Partido Bolchevique.
La consecuencia inmediata de la toma del poder por los trabajadores fue la construcción de un Estado socialista. En este Estado, gracias a la liberación del trabajo del yugo del capital, se produjo un aumento inusitadamente rápido y amplio de las fuerzas productivas, que convirtió al país económica y políticamente atrasado en el buque insignia del desarrollo mundial. Se creó una sociedad socialista, una sociedad de gente de alta cultura, alto nivel de educación, alta moralidad cívica. Esta es la base sobre la cual el pueblo soviético pudo lograr la Gran Victoria sobre el fascismo. Fueron capaces de ser los primeros en el espacio y en la energía nuclear. Fueron capaces de garantizar la paz para el mundo en el período posterior a la Segunda Guerra Mundial.
La contrarrevolución burguesa de finales de los años ochenta y principios de los noventa destruyó todos estos logros, destruyendo el sistema social socialista, el estado socialista —la URSS— y fusilando de manera demostrativa a los restos del poder soviético en 1993. Los propagandistas burgueses de hoy tratan de demostrar que la contrarrevolución tuvo lugar debido a la inviabilidad del socialismo. ¡Mentiras! La revolución burguesa se hizo posible como resultado de que el Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS) en el poder dejó de expresar los intereses de la clase obrera y de todos los trabajadores, y se rebajó a aceptar e implementar la restauración del capitalismo bajo el disfraz de la “perestroika” y el curso del “mercado”.
La lista de cosas amargas y sombrías que el capitalismo ha traído a nuestra tierra y a nuestras vidas es interminable. Baste decir que ha creado una monstruosa estratificación entre ricos y pobres, ha hecho que la posición de las personas en la sociedad y sus propias vidas (¡la medicina ya está pagada!) dependan directamente del grosor de sus billeteras, ha privado a los trabajadores de todos los derechos y de todas las oportunidades de influir en el destino de su país.
El capitalismo nos ha colmado literalmente de los vicios más repugnantes de la sociedad burguesa y también nos ha arrastrado a una serie interminable de conflictos y guerras sangrientas a nivel nacional, el mayor de los cuales, la guerra actual con el régimen nazi en Ucrania (y ese régimen surgió solo gracias al capitalismo), se está desarrollando ante nuestros ojos.
Cuanto más se prolonga esto, más obvio se hace que la única salida para los trabajadores es lograr un nuevo camino socialista de desarrollo, romper el sistema burgués. Aquí no hay reformas ni elecciones que cambien nada. Y así nuestros ojos se vuelven hacia el ejemplo del Gran Octubre.
El gobierno burgués comprende todo esto muy bien y se esfuerza por cortar de raíz cualquier movimiento hacia una nueva revolución. Siguen las represiones contra los activistas, la prohibición de eventos públicos pacíficos bajo diversos pretextos, así como cualquier manifestación de protesta en general. Existe el deseo de prohibir la propia alfabetización política de los opositores al régimen burgués, las enseñanzas del marxismo-leninismo, equiparándola con las ideologías “terroristas” y “extremistas”. Pero sabemos por la experiencia de la revolución de 1917 que cuanto más gruesa sea la tapa que la burguesía trate de empujar sobre el caldero de las protestas obreras, más fuerte será la explosión.
Long live the 107th anniversary of the Great October Socialist Revolution!
Long live the coming October!
Happy Revolution Day!
Central Committee of the Russian Communist Workers’ Party (RKRP-CPSU)
Presidium of the Central Committee of the United Communist Party (OKP)
Central Committee of the ROT FRONT
Executive Committee of the Labor Russia movement